Está demostrado que la fruta, aunque no lo parezca en apariencia-valga la redundancia- y en realidad no lo sea, es un reclamo infalible por su belleza y vistosidad. Lo último, un plato llamado "Meat Fruit" que no es otra cosa que hígado de pollo disfrazado de mandarina.
Ayer nos encontramos con la notícia de que el conocido chef británico Heston Blumenthal ha abierto un restaurante (Dinner) en la milla de oro de Londres. Se trata de un espacio diáfano con vistas a Hyde Park, con la cocina a la vista de los comensales. Nada menos que 45 pinches, más el segundo Blumenthal, Ashley Palmer-Watts, preparan recetas rescatadas del culinario británico utilizando las técnicas de hoy, elaboradas con todo el mimo, calor , tiempo y dedicación.
Uno de los platos que incluye el recetario y que ya se ha convertido en la pieza de arte comestible más admirable del local es el llamativo Meat Fruit, y si no , para muestra un botón.
Os dejamos con este plato de aspecto tan delicioso... Y lo dicho, la fruta, hasta para decordar.
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